La magia
negra puede servirse de distintas vías para cumplir con sus propósitos. Entre
más oscuras sean estas más poderoso será el maleficio. Es por eso que la magia
negra tiene que ver con todos los misterios y de esta manera, con el miedo
puesto que ésa es su manera de dominar, a través de lo que está oculto por ser
lo que más tememos.
Una de las
asociaciones más peligrosas que hace la magia negra es con los muertos. Este
nexo con el mundo del más allá dota de gran poder cualquier tipo de maleficio.
Existen
diversas maneras de realizar el contacto con la muerte. Los libros de magia
negra hablan sobre todo de tres tipos de relación entre los muertos y la magia
negra:
Servirse de
la fotografía de un muerto: la persona interesada deberá encontrar una
fotografía de buen tamaño, en la que pueda apreciarse claramente el rostro del
muerto. Lo ideal es servirse de alguien que no haya sido una buena persona, por
ejemplo un criminal, es decir que haya cometido actos de violencia o que al
menos, haya muerto en circunstancias de violencia. También se aconseja que sea
una foto de alguien que murió recientemente.
-Profanación de tumbas: el deseo por hacer
el mal puede conducir a la persona a servirse de alguna parte, aunque sea muy
pequeña del esqueleto de un muerto. Algo que se puede hacer profanando una
tumba, un acto que está penado por la ley, por la religión y por la moral.
-Realización de ritos en el cementerio: El
cementerio es uno de los lugares preferidos para realizar todo tipo de ritos de
magia negra. No solo para preparar y llevar a cabo maleficios, sino para
iniciar y acompañar a aquellos que quieren ser portadores de magia negra.
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