Las relaciones sentimentales son complejas por lo general. No es fácil encontrar una persona que te haga sentir bien, que te guste y que sienta lo mismo por ti.
Es por esto por lo que cuando se empieza a salir con alguien
hacemos todo lo posible para que vaya bien. Y justamente por esto podemos caer
en una serie de errores que sin duda no llevara a nuestra relación a buen
puerto.
Uno de los primeros errores es el de ir demasiado rápido en
tu nueva relación. Es posible que te hayas enamorado hasta las trancas de tu
nueva pareja, pero no exijas a la otra persona que nada más comenzar la
relación se comporte o sienta el mismo cariño que tú. Cada persona necesita un
tiempo y no es buena idea forzar las cosas. Ir a ritmos distintos significa que
uno de los dos va a agobiarse y lo más probable que hasta llegue a salir corriendo.
Esto mismo es aplicable a otras situaciones como irse a vivir juntos, conocer a
su familia o hacer planes de futuro nada más conocerse. Mejor no precipitar
demasiado las cosas. Claro que ir demasiado despacio tampoco es nada
aconsejable.
Otra cosa que no debemos hacer al empezar una relación es
olvidarnos de nosotras mismas. Lógicamente querrás pasar tiempo con él, tiempo
pensando en él y satisfaciendo sus deseos. Pero no por ello debes olvidarte de
ti. No puedes renunciar a tu dependencia ni a tu intimidad, ni pienses que toda
tu felicidad depende por completo de tu relación de pareja. Se pueden hacer
muchas cosas juntos, pero siempre vendrá bien mantener un espacio para cada
uno.
Tampoco es conveniente ser un libro abierto desde el primer
momento. Está claro que la confianza, la sinceridad y la buena comunicación
deben ser la base de cualquier relación, pero también es cierto que al comienzo
de una relación es mejor dejar algo de misterio para que no se pierda el
interés. No es aconsejable contar toda tu vida en una primera cita, por muy a
gusto que estés con esa persona.
Por otro lado no caigas en el error de intentar cambiar a la
otra persona. Si hay algo que desde un principio quieres modificar en la otra
persona, eso es que en realidad no termina de agradarte, por lo que igual es
mejor que lo dejes y no te inmiscuyas en una relación que, seguramente, no
tenga demasiado futuro.
Otras malas costumbres que tenemos al comienzo de una
relación sentimental es querer controlar todo y además estar siempre a la
defensiva.
Si hablamos de las redes sociales, hay estudios que aseguran
que las parejas más felices son aquellas que no publican sus aventuras amorosas
en las redes. Esto es debido a que no necesitan la aprobación de nadie. Ya
sabemos que es difícil no caer en la tentación, pero si acabas de comenzar una
relación, mejor demuéstraselo en persona, para publicar cosas ya habrá tiempo.
Y por último vamos a hablar de una mala costumbre que a casi
todas nos ha pasado en algún momento, y no es otro que ese terrible afán de
poner etiquetas a todo. No te empeñes es reducir tu relación a un simple
término. No fuerces las cosas, deja que el tiempo haga su trabajo. Cada
relación es un mundo, disfrútala y de esta forma evitarás algún que otro
malentendido. Eso sí, nunca, nunca, nunca os olvidéis de deciros cómo os
sentís.
ME ENCANTA Y CUANTA RAZON TIENE POR CIERTO ULTIMAMENTE LOS ARTICULOS SON UNA PASADA GRACIAS
ResponderEliminarRealmente es un artículo muy acertado
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