No es mucha la gente que dispone de la capacidad de tener visiones. No hay que confundir las mismas con aquello que vemos mientras dormimos y que después ocurre. Una visión tiene lugar en momentos de plena consciencia, la persona está despierta y no hay posibilidad de que sienta confusión pensando que lo que ve no es real o lo está imaginando.
Las visiones suelen durar unos instantes para, de inmediato, desaparecer completamente. Por tanto, se debe prestar atención a la fugaz imagen que aparece ante nuestros ojos para poder descifrar lo que trata de decirnos esa revelación.
La visión puede estar relacionada con nosotros mismos o con otras personas y a menudo quieren servirnos de advertencias para sucesos futuros, para que actuemos con precaución ante determinadas circunstancias que ocurrirán, e incluso para cambiar el destino.
Las visiones se pueden experimentar estando solos o en compañía de otras personas, pueden aparecer de pronto mientras se realiza cualquier tarea, pero en cualquier caso y aunque no logremos dar con su significado oculto en el momento en que ocurre, notamos que es un suceso fuera de lo normal.
QUE INTERESANTE Y GRANDES PROFESIONALES COMO PAULA Y CLAUDIA
ResponderEliminarMUY BUEN ARTÍCULO
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